Marcela Acuña acusó a su hijo por el femicidio de Cecilia: "¿Por qué si fue César nos incriminan a nosotros?"
La esposa de Emerenciano Sena se desligó del crimen y aseguró que su marido también es inocente.
Marcela Acuña escribió una carta desde su celda en el Departamento Violencia Familiar y de Género de Resistencia, Chaco, en la que apuntó directamente contra su hijo César Sena por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, ocurrido el viernes 2 de junio en la casa de la familia. La carta fue distribuida por Patricia, su hermana.
La suegra de la víctima acusó al “partido judicial y a los radicales” de “armar una causa” y aseguró que tanto su esposo como ella están presos siendo “inocentes”, ya que, según escribió, no hay pruebas para que estén detenidos. A la vez, repudió el presunto femicidio.
Qué dice la carta
“Una cosa es el femicidio de Cecilia, repudiable desde todo punto de vista, y otra es querer inculparnos desde una fiscalía que sin pruebas nos tiene no solo encerrados, paseándonos como trofeos con esposas como delincuentes, sino que nos mete en una causa con una carátula que no se sostiene hacia nosotros con pruebas, solo con supuestos”.
Luego, la dirigente política acusó directamente a su hijo por el crimen de la chaqueña: “¿Por qué, si fue César (mi hijo) responsable, nos incriminan a nosotros? Creo que por muchos motivos, principalmente la grieta que vivimos como patria, nosotros somos parte de una generación nueva junto a Emerenciano”.
En esa misma línea, continuó con un mensaje enfocado en lo político para tratar de desligarse junto a su marido, Emerenciano Sena. “Hemos dado dignidad junto a un proyecto nacional y popular que nos permitió hacerlo, no solo a nosotros, sino a cientos de dirigentes que iniciaron mirándonos en el camino de la autogestión”.
Acuña dijo que la Justicia encontró “el punto exacto para atacar en serie a Emerenciano (Sena), a lo que él significa, y a (Jorge) Capitanich, en un escenario electoral donde lo que tienen son los grandes medios a su favor y una justicia de calzoncillos flojos que, influenciados por los grupos económicos que manejan los grandes medios, no dudó en encerrarnos y prenderse a los desmanes del falso periodismo, sumado a las redes ilícitas de difamación”.
“Los radicales se hicieron ver y por desgracia, tomaron el dolor de un pedido por bandera política, mezclando todo y dando mucho para que se tergiverse los medios”.
“Creo que a esto se sumaron los que responden directamente a la matricula ideológica de los dictadores militares, portales truchos que siempre en nombre de la patria anhelan matar de alguna manera a nosotros “los negros” y aquí estamos en esa batalla donde los que estamos encerrados somos nosotros, no ellos, y nuestra vulnerabilidad, sin tener voz y privados de libertad, hace que seamos socialmente culpables.
Condena social por ser papá y mamá de César, por ser piquetero, por ser socialistas, por haber tenido a mi padre tenido por razones políticas, por haber levantado la bandera cubana con la argentina, por amar a un caudillo rojo (Emerenciano), por haber hecho Emerenciano más de 400 casas y estamentos públicos, SINEM presos por haber creados bibliotecas, centros de recreación, y tanto más.
Todo esto nos hace culpables, clan, mafiosos para la Husticia y para aquellos oportunistas que creen que van a volver a gobernar la provincia, y que con el encierro a Emerenciano y la exposición pública van a ganar y gobernar.
Somos inocentes y aquellos que actúan con malicia, que Dios los perdone, han generado mucho dolor y eso todo Dios ve. No se usa el dolor ajeno para posicionarse en una sociedad que cree en los medios de comunicación.
“Cambio de color de birome porque el fiscal dictaminó que en mi encierro debo escribir lo menos posible, por lo cual debo pedir con anticipación la birome, bajo la excusa de que es un riesgo.
Asimismo, terminan de hacerme firmar la prisión preventiva, de seguro será un logro para el fiscal que el día que me conoció me dijo “no vas a hacer lo que vos querés”, amenazante delante de policías antes que estalle esta comedia dantesca organizada por él y su grupo mafioso que quiere ver a Emerenciano derrotado, preso, y a torturar a una mujer como yo por haberse sentido desafiado.
Peor va más allá, además de la prisión preventiva ordeno que no tenga acceso a determinados libros, entre ellos dos que me trajo mi hija, uno de Montesquieu y otro sobre el proyecto nacional y popular donde se levanta la figura de Cristina Fernández de Kirchner, nuestra vicepresidenta. Al parecer son libros prohibidos para mí, como la birome, como los diarios, radio y hasta el pedido de un MP3 con música clásica, todo es no por orden del fiscal de género, Cáceres Olivera, hasta Cristina Kirchner.
Una acción lo dice todo, sigo con mi huelga, libertad a Emerenciano. Domiciliaria ya”, concluyó Acuña.